sábado, 20 de abril de 2013

Los captcha ayudan a digitalizar libros

Captcha o no captcha, esa es una de las cuestiones que se plantea todo autor de un blog a la hora de validar comentarios. El captcha son esas letrujas que aparecen medio distorsionadas que deben introducirse en un cajetín a la hora de enviar comentarios. Es una herramienta que se utiliza para evitar los robots que mandan spam automático, ya que al haber introducido bien los caracteres de validación en teoría queda demostrado que el comentario ha sido escrito por un ser humano.

Sé que el dejar los captchas es una decisión un tanto polémica, porque a la gente en general (me incluyo) no le gusta nada tener que descifrar los caracteres (muchas veces, casi imposible); se pierde tiempo y da pereza. No obstante en este blog están habilitados. Ya lo siento, pero desde que los tengo no he recibido nunca un comentario sobre Viagra ni alargamientos de pene. Es muy cómodo para los administradores y hace un tiempo descubrí otra ventaja que reafirma mi decisión de tener captchas. Resulta que el esfuerzo invertido en teclear esos galimatías no es en vano, ayuda a digitalizar libros. Y es que parece ser que las letras que forman los captcha en realidad son palabras que los dispositivos que transforman los textos físicos a formato electrónico no han sabido interpretar y necesitan de un humano que pueda leerlo.

Os dejo a continuación un vídeo muy chulo que explica la evolución y finalidad de los captchas, así como algunos proyectos de lo más divertido que han surgido gracias a esta herramienta:




Y vosotros, ¿qué opináis? ¿A favor o en contra de los captchas?

miércoles, 17 de abril de 2013

Antología: "Catarro de Pecho" por Fernando Vicente

¡Inauguramos nueva sección en "No me vengas con historias"! A partir de ahora, en este apartado de antologías os iré presentando a microrrelatistas que han elaborado recopilaciones con algunos de sus textos. De esta forma yo puedo tener recopilados decenas de cuentos en un mismo sitio, que ando muy desactualizada con los blogs, y vosotros podéis disfrutar de literatura de la "güena" de primera mano. Y para esta primera entrada tan especial, os traigo a un gran amigo: Fernando Vicente.

Hace unas semanas Fernando lanzó a la blogosfera "Catarro de pecho", una recopilación de casi 30 microrrelatos y unos cuantos "achuses"... En mi opinión es una edición muy cuidada; está muy bien hecha y se nota que ha sido elaborada con mimo. Además, como no podía ser de otra forma, tiene ese factor de originalidad con el que Fernando nunca deja de sorprenderme. Pero no adelanto más, a continuación la entrevista al autor, donde nos da más detalles de su obra.

No sólo de microrrelatos vive el hombre
¿Cuánto tiempo llevas escribiendo? ¿Cuándo comenzaste con los microrrelatos?

Escribir me ha gustado siempre, solo que no lo hacía: dejaba que las historias nacieran, crecieran y murieran dentro de mi cabeza. Hace cuatro o cinco años (tengo mala memoria) me dio por hacer un curso de escritura y a partir de ahí me animé a «publicar» lo que escribía. Con el microrrelato empecé más tarde, hace dos o tres años, pero en realidad todo lo que nunca he llegado a escribir siempre ha sido muy cortito, así que supongo que llevo más de tres décadas pensando microrrelatos sin llegar a escribirlos ¡Soy un pionero!

¿De dónde surgió esta afición?

Mi padre escribía artículos políticos así que puede ser que venga de familia. Si me hiciera un análisis de adn, a lo mejor encontrábamos restos de Marcial, Baltasar Gracián o Leonor de Córdoba, todos ellos paisanos míos, aunque lo dudo. Es más probable que encontremos adn de dinosaurio (por parte de mi madre, que nació en una zona de yacimientos paleontológicos).


¿Por qué te decidiste a abrir un blog? ¿Se han cumplido tus expectativas?


Abrí un blog por recomendación de una conocida escritora de micros y lo he atendido de una manera inconstante desde su apertura, como le ha pasado a la mayoría de los blogs de microrrelatos. A mi parecer, el formato blog ha muerto o, dicho de manera más precisa, ha cambiado su función: el blog hoy debe ser simplemente un repositorio de textos, pero la interacción con el lector debe hacerse a través de las redes sociales. Casi todos participamos en varias redes sociales y resulta más cómodo compartir el enlace a una entrada del blog en todas las redes a la vez que intentar enlazar, por ejemplo, un texto de facebook dentro de G+.


¿Qué te llevó a realizar “Catarro de pecho”?


Al final del primer año del blog hice una recopilación de todo lo que había publicado en el blog, pero fue más un capricho. Esta vez, como mi ritmo de publicación es menor, he querido dejar constancia de aquellos relatos que a mí me han satisfecho aunque sea moderadamente.


"Catarro de pecho" es una antología muy elaborada con una estructura que me ha parecido tremendamente original. ¿Podrías explicar qué son esos enlaces "Achús" al final de algunos micros? ¿Por qué algunos los tienen y otros no?

Cuando empecé a recopilar los relatos que tenían posiblidades de entrar en la antología, me di cuenta de que en varios relatos había repetido temas o formas expresivas, de modo que la lectura de un cuento me llevaba inconscientemente a otro. Si incluía ambos, el libro sería repititivo y largo (cosa que desde el principio quise evitar); si no lo hacía, yo pensaba que se quedaba cojo. De modo que dejé la opción de que el lector hiciera lo que quisiera: al final de algunos relatos, se puede saltar aun relato relacionado con el que acaba de leer a otro colgado en internet pinchando en un enlace, que llame «achús» por aquello del catarro. Reconozco que la relación entre ambos textos a veces no es muy evidente, pero existe.

Después se me ocurrió que sería irónico, después de las horas dedicadas, que el libro no estuviese acabado nunca. Así que incluí un último «achús» que enlaza a un micro que puede cambiar cada cierto tiempo. De momento, no ha ocurrido, pero espero que antes de que acabe el mes de abril, esto sea así.

Me gustaría agradecer a Rosa Martínez que me ayudara con la portada del libro y a Ana Vidal que corrigiese el «manuscrito». ¡Gracias mil, chicas!

¿Qué criterio has usado para hacer esta recopilación: temporal, temática u otra clasificación?Si tuvieses que quedarte con algún microrrelato, ¿cuál sería?


Solo que los relatos significasen algo para mí, nada más. No hay otra razón para escoger unos u otros y aún así muchos de los que me gustan se han quedado fuera. De los que hay en el libro, le tengo mucho cariño a «Mazinger».


¿Tienes una nueva antología en mente? En caso afirmativo, ¿podrías adelantarnos algo?


Tengo bosquejada una novela muy convencional y una obra de teatro innovadora. No escribiré ninguna de las dos con total seguridad. En cuanto a microrrelato, mis intenciones a más corto plazo pasan por a) escribir alguno de vez en cuando, b) comprarme una cámara medio decente y rodar microrrelatos (y dejar de usar el móvil para eso) y c) aprender a programar para tabletas y hacer auténticos microrrelatos multimedia (música, ilustración, video, interconectividad y realidad aumentada. No haré ninguna de las tres cosas con total seguridad.


Bueno, pues sin más preámbulos, aquí tenéis "Catarro de pecho". Disfrutadlo con salud y no dejéis de leerlo ni de comentar en el blog de Fernando:


Puedes seguir a Fernando en su Facebook o a través de su cuenta de Twitter.

¡Hasta pronto Cuentistas!

martes, 16 de abril de 2013

Rojo

Elegiste los muebles del baño de un granate intenso, a juego con los azulejos bermellón. En el suelo escarlata, junto a la bañera en la que estás sumergida, yace hecho un revoltijo el vestido carmesí de Prada que compraste en tu último viaje a Burdeos. La gargantilla de rubíes que adorna tu cuello, regalo de tu ex, refleja la copa de vino tinto que dejaste reposar sobre el lavabo, marcada en el borde por el carmín de tus labios. No es que la sangre huya de tus venas para teñir tu piel rosada; tan sólo te mimetizas con el entorno.

Safe Creative #1303314862685

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Hacía mil años que no posteaba un cuento. A ver si empiezo a desprenderme de los malos hábitos...
¡Feliz martes Cuentistas!

domingo, 7 de abril de 2013

He terminado de leer... "Los magos" de Lev Grossman

Sé que tengo pendientes aún tres reseñas del año pasado, pero no lo he podido evitar, tenía que hablar de este libro antes de que el paso del tiempo suavice mi crítica.

Empecé a leer "Los magos" en enero de este año y lo terminé a principios de esta semana. ¿Por qué he tardado tres meses en acabarlo? ¿Porque viajo menos en metro? ¿Porque aprovecho los trayectos para estudiar? Pues sí y sí, pero sobre todo y más importante: PORQUE ES UN AUTÉNTICO ROLLO.



La siguiente pregunta que os estaréis formulando es: "Si es tan coñazo, ¿por qué no lo has abandonado?". Pues porque me ha hecho un "maguire" (podría llamarlo un "pancol", por aquella antología de animales terrible, pero leí "Wicked" antes) en toda regla: el libro tan sólo es interesante en momentos precisos, bien distribuidos, que te animan a seguir leyendo. Luego todo es mentira, claro. Aunque lo parece durante algunas páginas ("ahora viene lo bueno, seguro", es lo que piensas), el libro no mejora y terminas desencantada con la historia. Pero justo en el instante que decides abandonarlo, sucede algo medio interesante y sigues leyendo. A esto hay que sumar un factor que siempre te echa para atrás a la hora de abandonar la lectura: el número de páginas que has leído. Cuantas más lees, más atrapado estás, porque da cosilla dejar un libro cuando ya has invertido una buena cantidad de tu tiempo en él. Me encantaría ser un poco más lista y aprender de estas experiencias, pero nada, no hay manera, no dejo el libro y la lectura se me alarga meses...

Me decidí a leer este libro porque tenía buena pinta. Creo que a estas alturas a nadie le extraña si digo que me gusta la novela juvenil. A veces te sale bien ("Los juegos del hambre") y otras, o bien mueres por sobredosis de azúcar y ñoñería ("Crepúsculo"), o bien deseas decirle cuatro cosas al autor tras leer las secuelas ("Sinsajo", tercera parte de la saga de "Los juegos del hambre"). Con "Los magos" fue una mezcla de ganas de leer este tipo de historia adolescente y una buena crítica de mi adorado George R.R.Martín, que decía que era mil veces mejor que Harry Potter. Yo diría que es un millón de veces peor, y eso que tampoco soy una fanática de la saga de Rowling.

Lev Grossman escribe un libro tedioso, sin tensión, ni misterio alguno. La historia, a mis ojos, es una mezcla entre Narnia y Harry Potter, con sexo entre medias. En este libro se mezclan demasiados personajes, demasiados años y demasiadas tramas en general; es como si quisiera haber agrupado 7 libros en uno, y claro, el resultado es caótico. No te enteras de lo que pasa, no puedes empatizar con ningún personaje porque no entiendes sus motivaciones ni su personalidad. El autor no sabe manejar la situación y todo se descontrola para justificar un pseudo historia infantiloide llena de sinsentidos.

Vamos, que ni lo abráis, que no merece la pena. Y George, no vuelvo a fiarme de tus críticas ¬¬

lunes, 1 de abril de 2013

¡Antologada!

Bueno, pues después de un mes sin decir ni pío (no por falta de ganas, os lo aseguro), comienzo el mes de abril comunicándoos una buena noticia. He sido una de las afortunadas que formará parte de la antología que prepara la editorial Talentura: "De antología".


Manu Espada y Rosana Alonso, los antólogos, me han hecho súper feliz al incluirme en la "Logia del microrrelato", el grupo de Cuentistas que compondrá el volumen. Aún no sé cuántos de mis textos (envié tres) aparecerán en el papel, pero vamos, con que haya uno yo ya estoy más feliz que una perdiz ^_^

La antología se presentará el próximo 18 de mayo en Madrid, coincidiendo con la III Megaquedada Microrrelatista, que también tendrá lugar ese día. ¡Va a ser un sábado súper genial! Ni qué decir tiene que comparto páginas con Cuentistas amigos a los que admiro un montón, por lo que la ilusión es todavía mayor. Y eso no es todo, puesto que el nombre de los autores antologados se va revelando poco a poco, por lo que la emoción (y los nervios) inundan el ambiente...

Jolín, estoy que no quepo en mí. Os seguiré informando, pero si queréis información de primera mano, no dejéis de visitar el blog de Talentura creado para tal ocasión...

¡Hasta pronto Cuentistas!