El pasado martes tuve la suerte de asistir a un taller de microrrelato impartido por Ana María Shua, organizado por Escuela de Escritores. El evento me vino de perlas para descansar de una larga jornada de estudio y me sirvió de pequeño paréntesis entre examen y examen. Y por si esto fuera poco, además Propílogo vino también, así que también fue una excusa para vernos un rato.
Sinceramente, yo esperaba una charla de dos horas por parte de Shua hablando de lo que era el microrrelato y su experiencia con él. Vamos, una clase magistral en toda regla. Me equivocaba. Sí que nos habló de microrrelato y sí que nos habló de su experiencia, pero también se incluyó la práctica y tuvimos que realizar tres ejercicios durante las dos horas que duró el taller. A mí esto me pilló totalmente de imprevisto, y después de chorrocientas horas de biblioteca tampoco estuve muy lúcida con los deberes que nos puso Shua. Además, no fui nada original y las ideas que se me ocurrieron se vieron reflejadas en los textos de otros asistentes (¡me deprimí mucho!). No así Gabriel, que se marcó tres micros de antología, que me dejaron alucinada. A ver si se anima a publicarlos en su blog...
El primer ejercicio consistió en escribir un anuncio (de esos que salen en los periódicos) para vender una máquina inexistente. En el segundo, tuvimos que escribir en forma de leyenda el origen de la Escuela de Escritores. En el último, y al igual que el reto de ficticia de este mes, teníamos que idear un microrrelato que no se entendiera sin el título.
Ana María, escuchó todos nuestros textos y nos hizo comentarios al respecto. Tampoco los criticó mucho, pero es que en cinco minutos que nos daba para escribir tampoco podía hacerse demasiado, así que se centró en resaltar lo que más le gustaba de cada uno.
A mí el curso se me hizo muy ameno y se me pasó enseguida. Shua, resultó ser una señora muy agradable y creo que ha sido una suerte poder compartir algo de tiempo con ella ya que, según me enteré más tarde, sólo imparte talleres puntualmente cuando viaja al extranjero.
Con Shua, tras firmarme "Cazadores de letras", su antología de microrrelatos |
Tras el curso, algunos profesores de Escuela de Escritores se llevaron a Shua a cenar, y muy amablemente nos invitaron a unirnos a ellos. De esta forma, y durante un ratillo, que al día siguiente tenía que madrugar, compartí con Shua morcilla y croquetas de jamón. Aunque la sensación de "ser una acoplada" no me la pude quitar en el rato de cena que estuve con ellos (y mira que recalcaron una y otra vez que no pasaba nada), lo cierto es que ahora puedo decir que "he cenado con la Shua", jejeje. ¡Qué me quiten lo bailao!
¡Hasta pronto, Cuentistas!
Danos envidia Acuática, di que si.
ResponderEliminarBesos desde el aire
los de Escuela de Escritores son muy majos. Oye se te ha olvidado dejar los consejos de doña Ana María. ¿No pretenderas quedartelos para tí sola?
ResponderEliminarQue suerte, Marina, me hubiera encantado estar allí. Yo creo que si llego a saber que iba a ser un curso práctico me habría liado la manta a la cabeza y me habría plantado en Madrid.
ResponderEliminarEstoy leyendo/releyendo Cazadores de letras y es una maravilla, no tiene desperdicio.
Como dice Rubén, cuéntanos más cosas de lo que dijo Ana Shua, a ver si se nos pega algo.
Suena de lo mas interesante, el ejercicio que os propuso me encanta, sobre todo lo de el anuncio de la maquina inexistente, genial, es un micro en si mismo mas alla del planteamiento, mas allá del resultado.
ResponderEliminarTenía curiosidad por saber de este taller (yo fui a la presentación de 'Fenómenos de circo' en Barcelona, pobre sucedáneo) y tú nos lo cuentas maravillosamente. ¡Gracias!
ResponderEliminarLa verdad es que nos hizo sudar con la improvisación obligada, pero fue un lujo estar en ese taller.
ResponderEliminarY la cena, otro placer. Menos mal que yo no tenía que madrugar, porque a algunos se nos hizo un poco tarde para ser martes...
Mereció la pena ir a Madrid, una vez más; aunque me quedé otra vez con las ganas de larga charla contigo y con Thanos. Ya llegará.
Abrazo
Gabriel
Sólo el hecho de un taller de escritura ya es suficiente, pero si a eso le añades los ejercicios que comentas y que los imparte Ana María Shua pues es como tocar el cielo literario. ¡Qué suerte! Por cierto, a lo mejor dentro de unos años es ella la que dice que cenó contigo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Buaaaa, yo me quiero ir a vivir a Madriiid :-(
ResponderEliminarMarinilla, lo que no me explico es cómo te da la vida para todo reina, que no paras.
Besos
Eso sí que es suerte!!! Y en las Microjustas estás imparable. :)
ResponderEliminar¡Qué suerte! Cuenta más, cuenta más... ¡Venga!
ResponderEliminarBesitos
Yo también lo hice, con Patro... la verdad es que es toda una maestra!!
ResponderEliminarBesicos
A petición popular, aquí van algunas de las cosas que nos dijo Shua (jolín, no sé por qué no lo he puesto en la entrada). Mmmmmmm, a ver que haga memoria... Shua nos dio algunas webs de referencia sobre microrrelato:
ResponderEliminarFicción Mínima
Cuento en red
Luego nos recalcó que el microrrelato existe desde que el mundo es mundo, aunque esté teniendo un gran auge ahora por los formatos que ofrecen las nuevas tecnologías. En EEUU los micros se conocen como "super-short stories", "sudden-fiction", "flash-fiction" y a veces incluso lo confunden con poemas en prosa.
También nos comentó que algo que distingue el microrrelato de otros formatos es la dificultad de ser contado oralmente, es decir, al estar tan medidas las palabras no puede interpretarse, ya que si el narrador cambia alguna palabra puede cargarse la historia por completo.
También nos comentó que a la hora de publicar hay que escribir cada texto en una hoja, porque cada historia debe disfrutarse sola y ver muchos textos juntos puede descolocarnos.
Por último nos habló de la diferencia entre aforismo y microrrelato (básicamente, si se intuye algo de poesía será aforismo, y si no, microrrelato).
El resto del tiempo lo dedicó a recomendarnos libros, a leer textos de ejemplos y hacer los ejercicios.
Como véis para ser un curso de dos horas estuvo bastante completito.
Espero haber satisfecho vuestras ansias de información, jejeje.
¡Un beso a tod@s!
;)
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