miércoles, 29 de junio de 2011

Segunda edición NMVCH: ¡Participantes! (3ª Parte)

¡Vamos con la tercera tanda de historias! ¡Disfrutadlas!

Solas - Citizen_0
Las mentiras que nunca te dije, las guardé en un tarro de galletas con sabor a canela. Todo lo demás salió un día en tu busca, encabezados por la certeza de que nunca podrías volver. Después de todos estos años astillados, repletos de polvo marchito, nada de lo que marchó ha vuelto. Y ahora duermo en esta oscura soledad, junto a un suave aroma de canela, que se enrosca a los pies de mi cama cuando me cree dormida.

No hace falta que hables. Yo responderé a tus preguntas. Hoy te hablaré de Cydonia. Es una ciudad que está en Marte, como de tu casa al colegio y así millones de veces hasta que te quedes dormida. Allí descubrieron unos bultos, como pequeñas rocas en el suelo con cara de personas. ¿Te gustaría viajar a Cydonia? Bien, ya estás allí. No, no voy a llorar porque te veré pronto. Dirán que estás muerta y que irás al cielo pero solo tú y yo sabemos dónde estás. Iré a verte cuando sea millonario y pueda viajar a Marte que lo he visto el otro día
en la televisión.

Oculto entre nosotros - Thanos Malkav
Llevan hablando de mí desde hace demasiado tiempo y lo cierto es que no saben nada. En estos años he visto como caían emperadores y reyes, como se creaban y destruían países sin más motivos que la pura sed de belicismo. He contemplado la muerte una y otra vez, sin piedad ni misericordia, y lo que más me entristece es que demasiadas veces ha sido en mi nombre.
Han olvidado lo que enseñé hace ya muchos siglos o peor aún, se han dejado guiar por falsos profetas y representantes que no hacen más que desvirtuar la palabra que traje.
“Y al tercer día resucitó y ascendió a los cielos”. Lo cierto es que lo segundo todavía lo estoy esperando…

Juego erótico - José Antonio Fernández
A maría, mi mujer, le pone que le mienta. Cuando hacemos el amor me pide que la llame Julia, el nombre de su mejor amiga.
Yo, para satisfacerla, lo hago. Lo que no le digo es que cuando estoy con Julia me pide que la llame María.

Fiel a la mentira - Raúl Garcés
Cariño, no me esperes despierta. Tengo muchísimo trabajo en la oficina. No sé a que hora llegaré. Yo también te quiero. Un beso. Adiós, adiós. Tras colgar el teléfono alzó su mano reclamando un taxi libre y se perdió en su interior mientras la tarde agonizaba. Nunca supo mentir. Cada vez que lo intentaba sus palabras temblaban como un niño asustado. Pero aunque solo fuera por un instante, había desterrado de su cabeza aquel desgraciado accidente de tráfico en el que su mujer perdió la vida.

Amores que matan - Sandra Montelpare
Terminal. Ese fue el diagnóstico médico. Habían hecho todo lo posible por salvarle la vida. Una excusa piadosa y torpe hizo que no pudiera palparlo en un principio. “Estoy con mucho trabajo”, le había dicho él. Su cuerpo se acostumbró. No sospechó ni siquiera con la indiferencia creciente que ya se manifestaba con dolores punzantes en el pecho.
Cuando el tumor de sus mentiras hizo metástasis, ya era demasiado tarde.

Nada más ver que usaba peluquín sintió un rechazo inmediato. “¡Mentiroso!”, le gritó. “¡Ni rubio, ni alto, ni ojos azules!”. “¿Y tú qué?”, le espetó él, ”¡De elegancia y clase nada de nada!”. “¡Qué sabrá un tipo vulgar como tú!”, le contestó la mujer. “Ya, lo que pasa es que eres una desesperada que necesita recurrir a los anuncios por palabras”, dijo él.
El estrépito de una moto que pasó junto a ellos interrumpió la discusión.
Se miraron.
Indeciso, el hombre murmuró: “Mal empezamos”. “Pues sí”, respondió ella casi en un susurro. El semáforo se puso en verde. En la otra acera había un puesto de helados.
- “¿Cruzamos?”
Hacía calor aquella tarde de verano.

Puro teatro - Mª Luisa Tomán
Desde que nos casamos vivimos en una mentira. Él me dice siempre “cariño”, y yo le respondo “mi amor”. Nunca dormimos abrazados, no hay regalos de aniversario y los besos son puro atrezzo. Nuestros padres están muy contentos. La empresa va viento en popa.

Presa - Claudio Leonel Siadore Gut
El último cazador del pueblo recorría el sendero cuando encontró desprevenido al lobo, oscuro y tan grande como un oso.
El hombre reprimía la emoción mientras apuntaba. Entonces la bestia habló:
—Si me perdonas la vida, te concederé un deseo.
El cazador sorprendido ante tal portento, se convenció de que si un lobo podía hablar, y con tanta humildad, lógico era que dijese la verdad. Pensó entonces, qué deseo pedir y cuando al fin lo decidía, una mirada en su espalda lo paralizó.
—Deseo… que me dejen continuar mi camino.
—¡Así sea! —dijo relamiéndose el monstruo, mientras abría paso.
El cazador fue derribado por la manada y, aún vivo, devorado.
En el banquete se escuchó gruñir:
—¡Humanos! ¡Siempre tan inocentes!

Tratamiento - L.E. Caraballo
Señora López, felicidades usted ha sido la ganadora de un viaje sin regreso al cementerio, no se asuste, ni me mire así, que lo que le digo es verdad, mire este documento firmado por su médico, el me envió. Siéntese y deje de temblar, respire profundo, cuente hasta diez y cálmese. No lo va a pensar un poco más, está segura que quiere ir a cobrar el premio enseguida, bueno esa es su decisión, por lo menos despídase de sus familiares, bien, si usted dice que no es necesario…,sígame. La lleve hasta la puerta, me gire para mirarla de frente y le dije –ahora entiende que no está enferma del corazón- y lo sonreí mientras me marchaba.

¡Mañana más!

2 comentarios:

  1. Gracias nuevamente Marina por organizar el concurso. Ahora, leyendo estas tandas de cuentos me imagino lo difícil que habrá sdo elegir a los finalistas. Todos de una calidad y oficio maravillosos! Besos van!

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  2. a cuál de los leídos hasta ahora mejor!!
    Un placer leerlos!!

    Saludos!!

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